Continúa la simulación en las distintas dependencias de gobierno, para atender a las mujeres víctimas de violencia, denunció Marina Reyna Aguilar, Presidenta de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres.
La activista, narró que el pasado viernes 10 de mayo, acudió a la agencia especializada en delitos sexuales, en acompañamiento de una víctima de violencia familiar, donde se encontró que por ser “Día de las Madres”, a la mayoría el personal, les “dieron el día”, solo había una persona de guardia, quien estaba a punto de terminar su horario, la responsable no estaba, por una llamada llegó.
La titular de la agencia, vía telefónica, le dijo que no había personal pero que fuera al Centro de Justicia para Mujeres “yo le dije no, porque va a ser lo mismo o peor”, les respondió Reyna Aguilar. En el lugar agregó, en tanto esperaba la atención, llegó otra mujer, víctima de violencia en busca de atención, y se encontró con la misma situación por lo que optó por acompañar ambos casos, “para que le dieran el servicio más rápido, porque a mí me da la impresión de que si no va alguien y las acompaña, las citan a otro día, o no sé cuánto tiempo las hacen esperar”.
El hecho de que las víctimas acudan acompañadas de una organización, les genera presión, y las atienden más rápido, argumentó la activista, quien subrayó que las deficiencias con que viene operando el sistema estatal para atender a las víctimas de violencia son evidentes.
En este caso, no había psicóloga, ni medica legista, porque “todas son mamás”, tuvieron que pedirle de favor a una doctora para levantar el certificado legista, que diera cuenta de los golpes que presentaban ambas mujeres, para evitar que como evidencia, se borrarán.
“Yo creo que es urgente que se revise esa parte al interior de las instancias de apoyo a las mujeres en situación de violencia, no está funcionando como se espera, 9 municipios de Guerrero, están declarados con Alerta de Violencia de Género, Chilpancingo entre ellos, la agencia donde estuvimos esta en un municipio alertado y no se tienen las medidas de emergencia”, expuso la activista.
Advirtió que las mujeres que acuden a estas instancias, son sobrevivientes de feminicidios, porque no es la primera vez que son agredidas, y los funcionarios y funcionarias no lo ven así, incluso no lamentan si algo les ocurre, “porque ya lo ven como un caso más”, ahora la violencia y los feminicidios se están normalizando de esa forma en el Estado de Guerrero.
Reyna Aguilar, reconoció que ha habido capacitación a las y los servidores públicos de todas las instancias de gobierno con perspectiva de género, “pero aunque no les guste que uno lo diga, hay mucha simulación”, sostuvo; no hay un cambio ni un impacto de estos talleres de capacitación, en cuanto la atención que venían y continúan dando en estas dependencias, donde no hay un compromiso institucional de quienes ahí laboran para con las mujeres en situación de violencia.
El hecho de que las y los titulares de las dependencia no prevea la atención días de asueto “es lamentable”, subrayó la feminista, cuando se sabe que Chilpancingo se encuentra bajo una alerta de género; y esto se debe refirió, a la falta de un seguimiento del comportamiento y servicio que otorgan los y las servidoras públicas, que solo responden bajo la presión de alguien más, cuando se trata de una mujer sola, no la atienden, y aplazan sus citas.
De los dos casos que acompañó el viernes pasado, una era de nivel social alto y otra bajo, “lo que denuesta que la violencia no tiene estrato social, cultura ni educación”; están sucediendo casos alarmantes, en algunos niveles es más sutil, oculta, no se denuncia por miedo al qué dirán, y en otros no, asintió Marina Reyna.
Fuente: SEM México