Saluda OCNF y CDD el cumplimiento de orden de aprehensión contra el llamado “matanovias”
Por Observatorio ciudadano nacional de De Feminicidio y Católicas por el Derecho a Decidir
Ciudad de México.- Son 6 años, 8 meses, y 17 días los que han pasado desde que fue encontrado el cuerpo sin vida de Yang Kyung María Jun Borrego.
La colonia Doctores fue testigo de un crimen que en un inicio fue investigado como suicidio, pese que el cuerpo de Yang se encontraba con la ropa desgarrada y con marcas alrededor del cuello, ademas de que presentaba también diversas lesiones, particularmente en las extremidades inferiores.
La noche del 21 de septiembre de 2014, JH“NN” en ese entonces pareja de la joven de 21 años, argumentó que Yang se había suicidado, lo que evidenció la falta de una investigación con perspectiva de género. Aunado a ello, la familia de la joven conocía el constante control y celotipia que él ejercía sobre ella.
La determinación de la familia para alcanzar la justicia logró que se realizara una investigación del caso con perspectiva de género, a partir de los estándares de la sentencia Mariana Lima Buendía de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Ello fue fundamental para que se lograra el esclarecimiento del asesinato de Yang.
El plan de investigación, fue realizado en coadyuvancia de las víctimas, el equipo del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) y las autoridades ministeriales.
Los tres aspectos fundamentales para lograr avances sustanciales fueron:
- La ampliación de dictámenes científicos en medicina forense, necropsia y criminalística con la perspectiva de género que permitió acreditar razones de género.
- El fortalecimiento de la investigación relacionada con los aspectos de genética, para la identificación del probable responsable, a partir del material probatorio ya existente.
- La acreditación de contexto de violencia, mediante peritajes sociales con perspectiva de género y considerando los testimonios que señalaban antecedentes de violencia.
Luego de esos avances, el 4 de junio de 2021, el Juez 50 Penal Oriente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) concedió la orden de aprehensión del inculpado, misma que fue cumplimentada por autoridades de la Fiscalía Especializada para la Investigación del Delito de Feminicidio, de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
Ante ello, desde el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio y Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) reconocemos la voluntad de las autoridades de la Ciudad de México para llegar al conocimiento de la verdad y garantizar el acceso a la justicia y hacemos un llamado para que:
- Sea tomada la declaración preparatoria del inculpado y se dicte auto de formal prisión toda vez que existen datos suficientes que permiten presumir la existencia del delito de Feminicidio Agravado cometido contra Yang Kyung Borrego, por el cual se debe seguir el proceso.
- Garantice la protección de la familia de Yang y de sus acompañantes.
- Genere acciones de prevención y atención a casos de violencia contra las mujeres en la CDMX a fin de inhibir la prevalencia e incremento del delito en la entidad.
- Cabe resaltar que las omisiones de las autoridades en el caso de Yang, al no investigar como feminicidio desde un inicio, generaron una ruta de impunidad que tuvo como consecuencia el feminicidio posterior de Campira Lisandra Camorlinga Alanís el 31 de diciembre de 2016, por el mismo agresor, dando cuenta de una violencia estructural e institucional, que no sólo no garantiza el acceso a la justicia y la verdad, sino que expone a las mujeres a ser víctimas de feminicidio.
Con ello queda evidenciado que sujetos como el “Matanovias” o los asesinos seriales son producto de un contexto de normalización e invisiblización de la violencia, que favorece la impunidad, la falta de protección efectiva y el acceso a la justicia.
El caso de Yang es paradigmático, por evidenciar como la mala investigación, no sólo lo condenó a la impunidad, sino que propició que ocurriera un posterior feminicidio. Este caso da cuenta de una ruta de impunidad, que no sólo afecta a otros casos, sino a la sociedad en su conjunto, favoreciendo la ruptura del tejido social.
Otra buena práctica evidenciada a partir de este caso, es la importancia de las mesas de análisis de casos entre familiares de víctimas, organizaciones de la sociedad civil y autoridades, impulsadas a partir de la solicitud de Alerta de Violencia de Género (AVGM) solicitada en 2017, lo que ayudó a la realización de nuevas diligencias y representa una estrategia clave, no sólo para el seguimiento de casos específicos, sino para cuestionar la impunidad existe, y para propiciar cambios en los procesos de investigación en la muerte violenta de las mujeres.
A pesar de la pérdida inicial de material probatorio y de las deficiencias de investigación que se documentaron desde que se conoció el caso, la incidencia con el área pericial de la Fiscalía, incluyendo criminalística y medicina forense, fue fundamental para corregir falencias de origen, a efecto de que se garantizara la perspectiva de género, lo que logró en última instancia, revertir la hipótesis de suicidio y acreditar razones de género para sustentar el feminicidio y sin duda la Fiscalía Especializada para la Investigación del Delito de Feminicidio aceleró la investigación e impulsó avances que hoy se acercan a la garantía del acceso a la justicia para la víctima y su familia.
Yang nació el 30 de agosto de 1993 en la Ciudad de México, hoy tendría 28 años, a pesar del tiempo transcurrido, la exigencia sigue siendo la misma: verdad y justicia #JusticiaParaYang
