Más de cien mujeres, activistas y familiares de víctimas de feminicidio confrontaron a Enrique Alfaro durante la vigilia por Vanesa Gaytán Ochoa, mujer que fue asesinada por Irving Emanuel Ramírez Barajas a unos metros de la entrada de Casa Jalisco, residencia oficial del gobernador de Jalisco.
“No queremos palabras, los papeles en el escritorio no sirven, tú estás aquí porque te estamos pagando un sueldo para que hagas tu trabajo, estamos pidiendo justicia no queremos palabras queremos justicia, justicia para todas”. Exigieron a Alfaro cuando éste se encontraba en la puerta de Casa Jalisco sin encontrar un lugar donde pararse.
Después de unos minutos, el gobernador ingresó a Casa Jalisco explicando: “vamos hacer lo que tengamos que hacer, cuentan conmigo”, a lo que contestaron las asistentes: “renuncia, renuncia, ni una más, ni una más, ni una asesinada más.”
La vigilia convocada a través de redes sociales, fue realizada en protesta por el asesinato de Vanesa Gaytán, quien a pesar de contar con una orden de protección fue asesinada por su ex esposo frente a uno de los lugares más “vigilados de Guadalajara”.
Al respecto, Guadalupe Ramos Ponce, investigadora y coordinadora del Comité de América Latina y El Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer en México (CLADEM), explicó para ZonaDocs que el objetivo de esta manifestación fue exigir la reestructuración todo el sistema de justicia en el Estado.
Ramos Ponce detalló que ellas siempre estarán dispuestas a aportar y participar con el gobierno; sin embargo, destacó que “son las autoridades quienes tienen que dar un giro, un cambio en sus políticas que históricamente se han hecho y no han servido.”
“Las mujeres han sido violentadas y asesinadas por décadas, esperamos aportar en esas reuniones lo que sea necesario, pero la responsabilidad está en ellos”, resaltó la coordinadora de CLADEM.
Fuente: Mario Marlo / Somos el medio