Veracruz / Alba Valdez (Testigo Púrpura).- Desde hace casi tres años, Margarita, y su hija de 15 años, se encuentran esperando la audiencia de sentencia para Rafael “N”, quien se encuentra bajo proceso acusado del delito de abuso sexual en contra de la menor.
En octubre de 2019, la hija de Margarita tenía 12 años y acudía a sus clases en una secundaría de Coatepec, a las 7:30 de la mañana, cuando Rafael “N” abusó sexualmente de ella.
Afortunadamente, la menor logró escapar y pedirle auxilio a su mamá quien con apoyo de vecinos lograron detenerlo, y hablarle a la policía para que el sujeto fuera detenido.
Desde entonces Margarita y su hija emprendieron un calvario entre instancias, ya que desde un principio la niña fue obligada a declarar los hechos traumáticos en repetidas ocasiones.
“Desde un principio todo estuvo mal, hubo revictimización a mi hija, sabemos que es parte del protocolo que ella pase a todos los peritajes, pero las formas en las que era interrogada eran muy revictimizantes, pero aún así seguimos”, dijo.
Debido a la pandemia las audiencias fueron suspendidas, pero al regresar a las actividades normales de los juzgados en Coatepec, las audiencias, y sobre todo la última que es la de sentencia, se ha cancelado 4 veces.
Esta situación ha causado mayor revictimización en la menor, quien a casi tres años de los hecho es llamada a declarar ante el juez, eso, además de revivir el trauma en la menor ha hecho que ella pierda actividades importantes en su escuela.
“Mira me dicen que vaya ella porque tiene que declarar y a la hora de la hora cancelan la audiencia, esta última vez nos dijeron que porque el abogado defensor del sujeto tenía COVID. Ahorita tenemos la audiencia el 25 de mayo y mi hija tiene exámenes importantes y les pedí cambiar fecha por eso, pero me dijeron que no, que si ya no quiero seguir el proceso entonces que ya dejemos esto así”, narra la madre.
Para este 25 de mayo se llevaría a cabo la audiencia, sin embargo, a última hora fue notificada que había sido cancelada debido a que nuevamente se encontraba enfermo el abogado defensor del agresor.
