Oaxaca, Oax (CIMAC Noticias).- La pandemia del COVID-19, que mantiene lesionada la economía de los países, acentuará la feminización de la pobreza, es decir mayor cantidad de mujeres con dificultades para el acceso a los derechos más básicos como son alimentación, vestido, salud y vivienda, señaló la economista oaxaqueña y catedrática de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), Ana Luz Ramos Soto.
En medio de la paralización de actividades económicas, las personas que se encuentran inmersas en el trabajo informal, han comenzado a resentir la falta de ingresos. Estudios realizados por Ramos Soto, han encontrado que el sector informal está integrado por personas profesionistas que no lograron colocarse en empleos que cubrieran sus expectativas, pero principalmente por mujeres madres solteras, viudas y madres de hogar quienes complementan los ingresos familiares.
“La pirámide poblacional en el estado de Oaxaca es más ancho del lado de las mujeres que de los hombres, es decir que hay una feminización de la pobreza porque el hombre migra a otros puntos en busca de mejores condiciones de vida y la mujer se queda al cuidado de la familia”, señaló.
El término feminización de la pobreza fue acuñado por Diana Pearce, profesora de la Universidad de Washington (USA). Sus orígenes se remontan a los años 70 y se popularizó a principio de los 90, especialmente a través de las investigaciones promovidas desde la Organización de las Naciones Unidas. El concepto se caracteriza por reconocer que la mayor parte de los pobres en el mundo son mujeres.
Ramos Soto precisó que dentro de la economía informal en donde las mujeres tienen mayor participación y están enfrentando dificultades para seguir laborando es en lo relativo a actividades domésticas remuneradas, elaboración y venta de artesanías, venta de artículos por catálogo y de artículos en la vía pública.
“Vemos que están padeciendo la pandemia y que se va a agudizar aún más en los siguientes meses por falta de trabajo”, señaló.
En términos generales -indicó- se tiene que apostar a las políticas de reactivación de la economía en noviembre y diciembre echando mano del fomento al turismo, sin olvidar -agregó- que la pandemia es de largo plazo.
Actualmente -indicó- lo que estamos viendo es un suicidio de las actividades económicas para salvar vidas humanas. El dilema más adelante será suicidar vidas humanas para salvar a la economía.
“Estamos apenas despuntando en la pandemia, apenas van a despuntar los contagiados”, declaró.
