Teherán (EFE).- Activistas de Irán han llamado a protestar durante los próximos tres días con movilizaciones y huelgas, después de que la Fiscalía del país realizase un confuso anuncio sobre el supuesto desmantelamiento de la Policía de la Moral, fuerza que detuvo a Mahsa Amini por llevar mal puesto el velo islámico y quien luego falleció.
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Y es que horas después del anuncio del fiscal general del país Mohamad Yafar Montazerí, medios oficiales han afirmado que se han malinterpretado las palabras de Montazerí y que el cuerpo, que vigila la vestimenta de las personas y detiene, sobre todo, a las mujeres que no se cubren de acuerdo con los códigos dictados por la República Islámica, no se ha suprimido.
Relajación de normas
La Policía de la moral, que ha desaparecido de las calles desde la muerte de Amini, depende del Ministerio del Interior y el Consejo Supremo Cultural de la Revolución, instituciones que no se han pronunciado aun acerca del supuesto desmantelamiento del cuerpo formado en 2005.
Además, Montazerí también se ha referido a una posible relajación en la normas de vestimenta de las mujeres, algo que estaría estudiando el Parlamento y que se anunciaría en unas dos semanas.
El velo es obligatorio en Irán desde 1983, poco después de la revolución liderada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979, quien declaró que sin esta prenda las mujeres estaban «desnudas».
Más protestas
«La unidad es uno de los factores para la victoria», ha afirmado el colectivo Jóvenes de los barrios de Teherán en redes sociales en su llamamiento para las movilizaciones de los próximos tres días.
Este grupo de activistas y otros similares han convocado a los iraníes a hacer huelga laboral este lunes, a manifestarse en los barrios el martes y a reunirse en la céntrica plaza Azadi (libertad) el miércoles.
Así, estas movilizaciones se suman a las protestas duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad que vive Irán, desde la muerte, el 16 de septiembre, de Mahsa Amini, tras ser detenida por la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico.
En los casi tres meses de protestas, más de 400 personas han muerto y al menos 2.000 han sido acusadas de diversos delitos por su participación en las movilizaciones, de las que seis han sido condenadas a muerte.
Pero si bien las revueltas comenzaron por la muerte de la joven kurda de 22 años, han evolucionado y ahora los manifestantes piden el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979.
