En Guerrero los feminicidios se han normalizado, se necesita ética en los partidos políticos, señala.
Chilpancingo, Guerrero / Josefina Aguilar Pastor (SemMéxico).- Marxitania Ortega Flores, hija del ex gobernador Rogelio Ortega Martínez, dio a conocer a través de sus redes sociales, el acoso del que fue víctima de parte del senador con licencia, Félix Salgado Macedonio, y dijo que años antes vio hacérselo a una amiga suya.
Ese miércoles, la hija del ex mandatario estatal, dio a conocer el desacierto y preocupación que le ha generado la postulación de Salgado Macedonio como candidato a gobernador del Estado, luego de haber sufrido ese agravio en carne propia.
“Una, en la presentación de mi novela, en el Centro Cultural Acapulco. Estaba ebrio y cuando se acercó a mi lo hizo de la peor manera, lasciva, con un abrazo impropio, por decir lo menos. ¿Saben ustedes que se siente en momentos así? Mucho asco. Asco de la cercanía, pero también del propio cuerpo de una”, narró la escritora.
“Es una experiencia que rebasa la incomodidad. Se experimenta mucha rabia de que alguien se sienta con el derecho de tocar el cuerpo de una de esa manera. Me lo hizo a mí, en un evento público, mi evento, en una posición de poder. Vi hacérselo a otra mujer, años antes, amiga mía, cuando fue presidente municipal. Lo pongo aquí porque eso por supuesto que me dan razones para no dudar en las mujeres que lo acusan de violación”.
Ortega Flores, licenciada en Letras por la Universidad nacional Autónoma de México (UNAM), señala que este asunto no es menor luego de que Guerrero es un estado donde los feminicidios son cotidianos y donde la violencia está normalizada.
“Es muy grave. Y no lo digo desde una postura de superioridad moral, no soy nadie”.
Admite que los partidos políticos y los políticos, son pragmáticos y quieren ganar elección, pero la historia reciente ya le ha enseñado el precio de ese pragmatismo a la izquierda.
“En estos tiempos difíciles en que la mayoría estamos sufriendo el dolor de la pérdida de seres queridos, el impacto de la crisis económica en nuestras casas, necesitaríamos a un gobernante a la altura de la crisis, humana o humano, si, con su sombra, pero más experimentado en lidiar las tremendas trampas del ego, que ya en colectivo, llevan a desastres”, menciona Ortega Flores.
En su texto, la escritora comenta que después de aquella ocasión –de la cual no revela la fecha exacta-, conversó dos veces con Salgado Macedonio, en la cuales, fue simpático, “el personaje alegre, bromista y listo que todos conocemos”.
Este comentario, se da a un día de que “TODAS LAS MUJERES DE GUERRERO”, como se ufanan en afirmar los seguidores de Salgado Macedonio, marcharon por las principales calles de la capital del estado, para manifestarle su apoyo, ante el riego de que le sea retirada la candidatura por parte de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena, órgano que analiza las dos denuncias por violencia sexual que pesan sobre el senador con licencia.
Entre los comentarios sobre la publicación, uno de los seguidores de Salgado Macedonio, de nombre “Luis Darwin”, cuestionó a la escritora, “¿Lo que no cuadra es porqué hasta ahora? ¿Por qué no lo denunció en su momento? ¿Por qué nadie se opuso cuando lo designaron para ser Senador de la República?, un cargo igualmente importante. En estas denuncias queda tristemente la duda de que son malintencionadas para manipular la opinión de los despistados y desinformados…En fin, ya el mismo Amílcar aceptó que Félix ganó en la encuesta, pero lo quieren “tumbar” con una chicanada dizque legal… como con la guerra sucia no pudieron hay que moverle por otro lado…”
En respuesta, Ortega Jiménez expuso: “Luis Darwin, esta no es una denuncia. Estoy compartiendo mi experiencia para que la gente, que quizá no lo conoce sepa por qué yo si les creo a las mujeres que lo acusan de violación, lo cual es un delito. Y sí, sí es una postura política, porque es deseable que la actitud de nuestros gobernantes sea ética”.
TEXTO ORIGINAL
Mucho he meditado en el proceso de selección de Félix Salgado como candidato a la gubernatura de Guerrero, por Morena y me genera desacierto y preocupación. Félix es un personaje, como todos los políticos (algo sabemos de eso) se construyen un personaje, en este caso, carismático y popular, pero también es una persona. Yo me he encontrado con él apenas 4 veces. Una, en la presentación de mi novela, en el Centro Cultural Acapulco. Estaba ebrio y cuando se acercó a mi lo hizo de la peor manera, lasciva, con un abrazo impropio, por decir lo menos. ¿Saben ustedes que se siente en momentos así? Mucho asco. Asco de la cercanía, pero también del propio cuerpo de una. Es una experiencia que rebasa la incomodidad. Se experimenta mucha rabia de que alguien se sienta con el derecho de tocar el cuerpo de una de esa manera. Me lo hizo a mí, en un evento público, mi evento, en una posición de poder. Vi hacérselo a otra mujer, años antes, amiga mía, cuando fue presidente municipal. Lo pongo aquí porque eso por supuesto me da razones para no dudar en las mujeres que lo acusan de violación.
No es menor el asunto porque Guerrero es un estado donde los feminicidios son cotidianos y en donde la violencia está normalizada. Es muy grave. Y no lo digo desde una postura de superioridad moral, no soy nadie. Si algo me ha mostrado esta pandemia es mi propia oscuridad, mis miedos, mi envidia y dolor. Y entiendo que cada persona es mucho más que su sombra. Las otras dos veces que he conversado con él ha sido un tipo simpático, el personaje alegre, bromista y listo que todos (as) conocemos.
Pero no es menor el asunto porque en todos esos momentos de impotencia, de frustración tremenda que hay en el ejercicio del poder, saldrá la sombra. Y sale de la peor manera (llamando por ejemplo, a tus seguidores, a que tomen el Capitolio). Sé que los partidos políticos y los políticos son pragmáticos y que quieren ganar elección, pero la historia reciente ya le ha enseñado el precio de ese pragmatismo a la izquierda (no olviden a Aguirre).
En estos tiempos difíciles en que la mayoría estamos sufriendo el dolor de la pérdida de seres queridos, el impacto de la crisis económica en nuestras casas, necesitaríamos a un gobernante a la altura de la crisis, humana o humano, si, con su sombra, pero más experimentado en lidiar las tremendas trampas del ego, que ya en colectivo, llevan a desastres.
Saludos y que esta primera luna nueva del año sea de renovación de sus principios más humanos y libertarios.
