El objetivo de este encuentro fue construir una agenda de la legislación y políticas públicas con perspectiva de género.
Ciudad de México Angélica Jocelyn Soto Espinosa (Cimac).- Fomento de empleo con igualdad, ampliación de servicios de cuidado, atención a la violencia contra las mujeres, garantía de los derechos sexuales y reproductivos y pluralizar de la participación de las mujeres en la política, serían algunos de los temas prioritarios a favor de las mujeres que las nuevas gobernadoras, alcaldesas y diputadas electas para este 2021 deberán incluir en su agenda de trabajo, recomendó el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
Convocadas por el Inmujeres en el “Encuentro de mujeres electas”, este 26 de agosto un ciento de todas las mujeres políticas –todas de distintos partidos políticos, algunas indígenas y afrodescendientes– que resultaron electas en la pasada jornada electoral del 6 de junio, se reunieron en el Centro Cultural Los Pinos, en la Ciudad de México.
Este encuentro fue el primero en su tipo, ya que también es la primera vez que tal cantidad de mujeres ocupará un cargo de elección en México. Luego de una serie de reformas legislativas que se impulsaron desde 2014 a favor de la paridad de género, este 2021 un total de siete mujeres estarían gobernando alguna entidad del país de manera simultánea. Además, el porcentaje de mujeres en la Cámara de Diputados pasó de 48.2 a 49.2 por ciento.
El objetivo de este encuentro fue construir una agenda común de trabajo hacia la representación sustantiva y hacia el perfeccionamiento de la legislación y políticas públicas con perspectiva de género.
Al inaugurar el evento, la presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman, enlistó algunos de los temas prioritarios que podrían encabezar la agenda de trabajo de las recientes cinco gobernadoras electas, las y las que entrarán en funciones desde este 2021: fomento de las mujeres en el trabajo con igualdad; aumento de servicios públicos de cuidado; atención, prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres; prevención del embarazo adolescente y erradicación del embarazo infantil; garantizar derechos sexuales y reproductivos; y fortalecer los mecanismos para el avance de las mujeres.
“Ejercemos el poder de manera diferente, cambiamos la política, tenemos distintas prioridades, el interés es más amplio y sobreponemos el bienestar colectivo. Por ejemplo (…) solemos tomar decisiones poniendo el bienestar de las personas sobre el crecimiento de las mujeres porque además sabemos que éste crecerá si se reducen las desigualdades”, refirió la funcionaria.
La titular del Inmujeres también llamó a las gobernadoras y presidentas municipales a conformar gabinetes paritarios y fuertes, además de garantizar la formación en la perspectiva de género de todo el funcionariado público.
También presente en el encuentro, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum (primera mujer en gobernar la capital del país) recordó que desde 1981 México ratificó la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Cedaw) que mandató que tomar las medidas para eliminar la discrimiación contra la mujere en la vida política y pública del país, pero este año sería la primera vez que existe un gobierno paritario y el mayor número de mujeres en gubernaturas, diputaciones y presidencias municipales.
Al respecto, la actual presidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados y segunda gobernadora en el país, Dulce María Sauri, recordó que en el mismo recinto de Los Pinos, pero hace 25 años, se presentó el primer Programa Nacional de la Mujer (1996-2000) que, además de concentrar todos los compromisos derivados de la 4 conferencia de Beijing por el adelanto de las mujeres, dio origen al Inmujeres. Así inició la hoja de ruta para garantizar la paridad en los puestos públicos.
La también pionera de la paridad destacó que Colima, una de las entidades que tendrá como cabeza del ejecutivo a una mujer, fue la primera entidad en tener una gobernadora: Griselda Álvarez Ponce de León, candidata del Partido Revolucionario Institucional y el Partido Popular Socialista, quien estuvo en el cargo de 1979 a 1985.
En la misma situación estaría Tlaxcala, donde en 1987 resultó electa como gobernadora la priísta Beatriz Paredes y hoy, 14 años después, estará gobernada por Lorena Cuéllar Cisneros.
Sauri Riancho recordó que en 1989, en Baja California, la priísta y senadora Margarita Ortega Villa contendió por la gubernatura de la entidad pero fue la primera candidata del partido en perder las elecciones. Este 2021, sin embargo, Marina del Pilar Ávila Olmeda continuará el propósito de Margarita. “Tenemos un tramo de responsabilidad con las que están detrás de nosotras y las que vienen”, dijo la hoy diputada federal.
Entre ecos y silencios, las participantes de este evento refirieron sus respectivas consignas partidistas, sin embargo, los aplausos casi generalizados en temas como castigar la violencia política, marcaron la posibilidad de algunas coincidencias políticas a favor de los derechos de las mujeres.
Cuando la representación del UNFPA en México, a cargo de Leonora Calderón, llamó a garantizar en todas sus agendas los derechos sexuales y reproductivos para todas las mujeres tuvo en la audiencia un recibimiento efusivo.
Durante los recesos del evento y a pesar de pertenecer a distintos partidos políticos, las nuevas gobernadoras electas que entrarán en funciones este 2021 (Marina del Pilar Ávila Olmeda, gobernadora electa de Baja California; María Eugenia Campos Galván, gobernadora electa de Chihuahua; e Indira Vizcaíno Silva, gobernadora electa de Colima; Evelyn Cecia Salgado Pineda, gobernadora electa de Guerrero; y Lorena Cuéllar Cisneros, gobernadora electa de Tlaxcala) se paseaban juntas por la sala.
Las entidades que representarán estas mujeres son emblemas de violencia contra las mujeres. Chihuahua, por ejemplo, es conocida mundialmente como la capital del feminicidio por el asesinato de mujeres desde 1990; Colima, por otra parte, es una de las tres entidades con el índice más alto de mujeres víctimas de muertes violentas por tasa; Guerrero, por su parte, tiene dos Alertas de Violencia de Género, una por feminicidio y otra por agravio comparado; y Tlaxcala, conocida también como la “capital de la trata”, por ser principal entidad de origen, paso y destino de víctimas de este delito.
Si bien ninguna de las gobernadoras electas expuso públicamente su agenda a favor de los derechos de las mujeres, en entrevista con Cimacnoticias, Indira Vizcaíno Silva, declaró que en campaña se comprometió a tener un gabinete paritario, la construcción de Centros de Justicia para las Mujeres, una escuela de funcionarios para sensibilizarlos en la erradicación de la violencia hacia las mujeres, también harán un programa de reforzamiento de valores cívicos en las escuelas, y crearán un Consejo de la Judicatura para vigilar la actuación de los jueces en la impartición de justicia en casos de violencia contra las mujeres.
Además de las gobernadoras, una treintena de diputadas federales y locales, y otra treintena de presidentas municipales participaron en el encuentro, donde fueron abrazadas por las palabras de todas las secretarias de Estado, así como senadoras y magistradas federales, presentes también en el evento.
En este evento sin precedentes, políticas de larga trayectoria compartieron con las recién electas (la mayoría jóvenes pero también con amplia experiencia en cargos públicos) algunos consejos para impartir política a favor de las mujeres: presenten iniciativas sustentadas en datos, no desistan en las negociaciones, no se confronten entre mujeres por intereses del partido, conformen gabinetes paritarios, den seguimiento a las reformas faltantes en materia de paridad, y, principalmente, “no se vale ocupar el cargo sin representar a las mujeres”.
