Vuelve Actualidad Árabe y lo hace volcada en lo que ocurre en las plazas iraníes. Decenas de miles de mujeres en todo el mundo árabe se han movilizado para solidarizarse con las revolucionarias del país persa, que se encuentran en la mayor de las revueltas que haya tenido lugar en Irán durante la última generación. En Líbano, el goteo de tragedias no cesa las intenciones de miles de personas, que se esfuerzan en reunir unos cuantos miles de dólares para poder navegar la nueva ruta migratoria que atraviesa el Mediterráneo en un intento de alcanzar la Europa Fortaleza.
El pueblo palestino lamenta las nuevas incursiones militares de las fuerzas de ocupación israelíes en Jenín, donde el miércoles mataron a cuatro personas e hirieron a otras 44. Los ataques del ejército en Cisjordania han dejado 90 víctimas mortales en lo que va de año, el registro más mortífero de los últimos siete. En el Golfo, Kuwait acude a las urnas por sexta vez en 10 años con la intención de iniciar un período de estabilidad que últimamente no ha encontrado.
Las mujeres del mundo árabe se solidarizan con las revolucionarias iraníes
Estos días, “¡Jin, Jiyan, Azadí!” no es solamente un cántico kurdo. Decenas de miles de mujeres a lo largo y ancho del mundo árabe han hecho suyo este grito de protesta que se traduce por “Mujeres, vida, libertad”. Lo cantaron las residentes de Saqez tan pronto como se conoció la noticia. Masha Amini, la joven que murió asesinada en Teherán a manos de la policía de la moral por no llevar bien puesto el hijab, era de aquella misma ciudad del Kurdistán iraní.
Las mujeres persas, kurdas, yazidíes y las de tantas otras minorías étnicas que residen en Irán han recibido el aliento de las vecinas de la región
El fallecimiento de Amini ha sido el caso de violencia estatal contra las mujeres que ha hecho colmar el vaso, esparciendo el mayor ciclo de protestas de la última generación iraní por todo el país. Pero las mujeres persas, kurdas, yazidíes y las de tantas otras minorías étnicas que residen en Irán han recibido el aliento de las vecinas de la región, que se han movilizado para expresar su solidaridad hacia las represaliadas por la Guardia Revolucionaria.
Al otro lado de la larguísima frontera entre Irán e Iraq, mujeres con el cabello al viento y otras que optan por ponerse el hijab se reunieron con pancartas que mandaban mensajes de apoyo tanto en árabe como en inglés. Algunos de los carteles pedían “Solidaridad con la revolución feminista en Irán y contra el hijab obligatorio”, recordaban que “el hijab obligatorio es una violación del derecho a las mujeres a la autodeterminación” y exigían “el alto al hijab obligatorio en las escuelas”. La concentración, celebrada en la plaza Al-Firdaws de Bagdad, fue solo uno de los canales por los que las iraquíes se volcaron con las revolucionarias iraníes, puesto que las redes sociales fueron también un lugar de encuentro a través en la etiqueta traducida como “No al velo obligatorio” (#لا_للتحجيب_القسري), una de las más utilizadas en el país.
En Palestina, el canal radiofónico Radio Alhara se une a las revueltas iraníes a través de su música. El programa Sonic Liberation Front emitió ayer jueves y hasta el día de hoy una programación especial, llamada “In Solidarity with Iran”. Durante 12 horas consecutivas, la emisora ofrece actuaciones en directo de artistas de la música electrónica iraní, como Xeen, Anahita Shamsaei, Aida Arco, KUCHULU o muchas más. “Que sus nombres estén vinculados a una campaña como la que organiza Sonic Liberation Front es una acción radical en sí misma; valoramos la valentía de las artistas que han participado en esta campaña”, agradecieron desde Radio Alhara.
Haciéndose fuertes a través de la unión, quitándose el velo en público o aplaudiendo a quienes lo hacían, centenares de mujeres se han concentrado también en el norte del territorio sirio. En concreto, lo han hecho en la Administración Autónoma del Noreste de Siria, donde convive población kurda y árabe. Allí, la muerte de Masha Amini y la tremenda represión contra las mujeres kurdas de Irán durante estos días ha causado un dolor especial, puesto que la mayoría de vecinas de la región comparten nacionalidad kurda. “Apoyamos las protestas en Irán”, decía a Reuters una mujer velada: “Nos hemos reunido para protestar contra la opresión que allí sufren las mujeres”, añadía la mujer.
En el resto de Siria también ha habido mujeres que han querido acordarse de las iraníes. Wafa Ali Mustafa, reconocida activista que aún busca a su padre desaparecido en manos del régimen de Bashar al-Ásad, es una de ellas: “A las mujeres valientes del Irán: vuestra lucha es la nuestra! Vuestra voz es la nuestra! Vuestro dolor es el nuestro! Las mujeres de Siria compartimos vuestra lucha contra la dictadura, contra el sistema patriarcal y contra la opresión. Os vemos. Os sentimos. Os apoyamos!”.