La periodista Cinthya Alvarado Enríquez y al menos 80 personas fueron víctimas de agresión por parte de la policía
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Chiapas (Billie Parker).- Por amparo concedido por los magistrados del Tribunal Colegiado Fidel Quiñones Rodríguez, Jorge Masón Cal y Mayor, Salomón Centena Urbina y el juez tercero de Distrito, Oswaldo Alejandro López Arellanos.
Se repuso la audiencia inicial (la primera fue el 12 de febrero 2021 ) para que el Juez de Control volviera a escuchar los datos de prueba y vinculara a proceso.
Con 60 datos de prueba la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) y las víctimas demostramos que hay suficientes elementos para situar a los agresores en modo, tiempo y lugar como perpetradores de tortura y otros delitos el 27 de enero del 2020.
Quedaron vinculados de nueva cuenta el ex secretario de seguridad pública municipal Pedro Enoc García Palazuelos Domínguez y otro ex policía, exceptuando de la vinculación a otra ex policía mujer de la que no hubo elementos suficientes, según Juez para aplicarle las medidas cautelares, aunque siguen bajo investigación.
El 27 de enero del 2020 el Ayuntamiento de Tapachula ordenó mediante su encargado de seguridad pública Pedro Enoc, atacar a los pobladores de Pavencul que reclamaban por la nula atención a su camino de más de 60 kilómetros en pésimas condiciones, con soberbia los dejaron bajo sol y sin atención más de 6 horas, por lo que se armo el reclamo a un ayuntamiento rodeado de policías municipales, antimotines, estatales y guardias nacionales.
Con todo el aparato del Estado gasearon y sometieron a más de 80 personas, 42 de las cuales a rastras y con total abuso de la fuerza brutal policíaca los aventaron en el sótano del palacio de gobierno para ahí seguir golpeándolos, amenazando los de muerte, humillándolos por ser indígenas y al final llevarlos detenidos a la Fiscalía Estatal acusados de incitación a la violencia y daños.
La periodista Cinthya Alvarado Enríquez quien transmitía en vivo la manifestación, y luego la golpiza, también fue maltratada, golpeada, humillada y mismo tratamiento en ese sótano donde Pedro Enoc le confirmó que a ella también porque era, dijo, quien incitaba y organizaba a los indígenas en su reclamo.
