SEMlac. Activistas por los derechos de lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales (LGBTI) marcharon en La Habana en la tarde del sábado 11 de mayo mostrando banderas cubanas y del arcoíris, y voceando consignas como “Sí se pudo” y “Cuba es diversa”.
Lo peculiar de la marcha es que se trató de una movilización inédita, alternativa a la programación oficial de las Jornadas Cubanas contra la Homofobia y la Transfobia que coordina el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) y que recorrió varias cuadras del Paseo del Prado, céntrica avenida de la capital cubana, aunque no contaba con permiso legal para realizarse.
La movilización había sido convocada desde las redes sociales, tras el anuncio de que la habitual Conga contra la Homofobia y la Transfobia, que hace una década organiza el Cenesex, no se efectuaría este año.
El comité organizador de la Jornada había dado a conocer el pasado 6 de mayo, también en las redes sociales, “un ajuste al programa”, en concreto la suspensión de la conga en La Habana y Camagüey, por indicación del Ministerio de Salud Pública (Minsap), organismo al cual pertenece el Cenesex, “en cumplimiento de la política del Partido, el Estado y la Revolución”.
“Cumpliendo con las orientaciones del Minsap no se realizará este año la Conga cubana contra la Homofobia y la Transfobia, por determinadas circunstancias que no ayudan a su desarrollo exitoso, tanto en La Habana como en Camagüey, sin que ello implique no retomarla para el próximo año”, suscribió el comunicado, que no precisó esos motivos.
El aviso generó todo tipo de reacciones en las redes: a favor y en contra, más y menos extremas, inconformidad, ofensas, mensajes de alerta y otros de incomprensión por falta de transparencia y no entender los motivos para el cambio del programa. En general se lamentó la suspensión del habitual acto festivo.
“Si no se da esa razón de peso, quedará como una tamaña injusticia que complace, aun no siendo su objetivo; obviamente, a los homofóbicos rabiosos, incluyendo algunas iglesias. Eso puede tener consecuencias diferentes, pero sobre todo y la peor: el sentimiento de EXCLUSIÓN”, alertó la periodista Mildred Obourke en un post en Facebook.
En esa misma plataforma, su colega Lirians Gordillo suscribía que “esta decisión supera y afecta a quienes organizan la Jornada desde hace una década, pero también a quienes trabajan todos los días desde muchos lugares, instituciones y colectivos para que ese día en esas calles se EXPRESE LA FELICIDAD DE SER EN TODOS LOS COLORES”.
Mientras Facebook se inundaba de mensajes, polémicas y reacciones, incluida la convocatoria a una marcha alternativa para el 11 de mayo –día en que debió celebrarse la Conga en La Habana–, iniciaban y proseguían el resto de las actividades programadas por el Cenesex para la jornada.
Como parte del programa se han desarrollado varios encuentros de debate y capacitación con jóvenes y personas de la comunidad LGBTIQ, paneles con activistas trans y profesionales de la academia de otros países, exposiciones fotográficas, dos muestras de cine diverso, una fiesta y una gala por la diversidad, entre otras acciones que aún continúan.
“Siento mucho que este año no tengamos la Conga contra la homofobia y la transfobia en la que cada año he participado”, opinó desde su perfil la jurista Yamila González Ferrer, quien a la vez no consideró atinado “el llamado que se ha hecho a una manifestación alternativa el próximo sábado”.
“Tenemos muchos espacios donde expresarnos, organizados por el Cenesex que es la institución que ha liderado todos estos esfuerzos con mucha sabiduría. Debemos ser respetuos@s de dicho liderazgo”, argumentó.
Al intervenir en la polémica, el médico y activista Alberto Roque Guerra consideró la prohibición de la conga como un “irrespeto al liderazgo del Cenesex” y agregó en otro momento del debate: “Atacar al Cenesex y al Minsap ahora es matar al mensajero. Mi opinión va dirigida a las decisiones y a las formas oscuras de hacer política y las consecuencias nefastas que eso genera”.
Tres días después del primer comunicado, el Cenesex emitió una segunda nota en la cual reconocía que la “no realización de la conga” había “tenido una amplia repercusión que se ha reflejado ampliamente en las redes sociales”.
Además, añadía precisiones a los motivos de suspensión, alegando el “envalentonamiento de grupos” que “pretenden utilizar nuestra conga para desacreditar, dividir y sustituir el verdadero sentido de esta actividad”, en un contexto de “agudización de la agresividad contra Cuba y Venezuela, que en el caso de nuestro país tiene su máxima expresión en la activación del capítulo III de la Ley Helms Burton”, apuna el texto.
La comunicación exhortaba a mantener la calma, la disciplina y la responsabilidad a “quienes desde el activismo o por sus sinceras convicciones cívicas sienten la lógica molestia y contrariedad que motiva este cambio en el programa”.
Desde su cuenta en twitter, la directora del Cenesex, Mariela Castro Espín, instaba a que “la madurez política y ciudadana de nuestra población #LGBTI debe predominar sobre cualquier intento por desvirtuar o sabotear lo que hemos hecho entre todas y todos durante más de una década”.
En tanto, a más de 740 kilómetros de la capital, en la provincia Granma, se reportaba el viernes 10 la realización sin contratiempos del habitual pasacalle que habitualmente se realiza allí como parte de las jornadas de mayo.
“Una mañana emotiva. Escoltados por la motorizada de la PNR (policía), un mar de pueblo y el respeto de todos, los activistas y promotores en Bayamo realizamos el habitual pasacalle en el marco de la 12ma Jornada Contra la Homofobia y la Transfobia”, describió el activista Omar Parada.
“Con consignas de #TodosLosDerechosParaTodasLasPersonas #ReescribamoslaFelicidad #NoAlBloqueo y muchos otros, hicimos patente el compromiso de trabajar unidos por el respeto a los derechos, el diálogo científico y el activismo social”, abundó en su post.
Poco antes de las cuatro de la tarde del sábado último, 11 de mayo, más de un centenar de personas se fueron encontrando en el Parque Central, en respuesta al llamado a la marcha en la capital.
Según iban caminando Prado abajo, rumbo al malecón habanero, se iban sumando más personas. En el recorrido de la marcha multicolor, con las banderas del arcoíris y de Cuba, se coreaban frases, consignas, se tomaban fotos y hacían videos que casi en tiempo real se subían a las redes.
“Todxs por Cuba. Hoy marchamos por la diversidad pacíficamente. El sentimiento general era de apoyo y de colaboración. Fue lindo ver a tantos amigos apoyando y compartiendo. Es lindo saber q existe la posibilidad de que Cuba sea un país más inclusivo y diverso”, publicó en su Facebook la activista Idania del Río.
En tanto, Afibola Sifunola, de la colectiva Somxs, anotaba en su muro: “organizamos nuestra Marcha, organizamos nuestras vidas, rompimos con la idea de que no podemos organizarnos”.
Y añadía: “Lo hicimos realidad, marchamos por primera vez por nuestrxs cuerpos, nuestras familias, nuestras verdades, nuestras vidas; y no porque un Centro Estatal nos dice que debemos. Lo hicimos porque quisimos, lo hicimos porque aquí estamos, lo hicimos porque tenemos el derecho de hacer visible, escandaloso, colorido, nuestra manera de amarnos. De lo privado a lo público, del control a la libertad”.
En un ambiente en el que predominaron la cordialidad y la alegría, la marcha transitaba por la calle sin mayores contratiempos.
“Las buenas causas, las causas justas, encuentran siempre su camino. La marcha contra la homofobia tuvo lugar desde el Parque Central, a los pies del apóstol, hasta Prado y Malecón. Muchas caras lindas compartiendo un momento importante”, escribía en esa red el fotógrafo Gabriel Guerra Bianchini, quien también subió a su muro de Facebook, como muchos asistentes, varias instantáneas del suceso.
La marcha se disolvió muy cerca de las intersecciones de Prado y Malecón, donde un cordón policial impidió el acceso a la arteria del paseo marítimo, ocupada con su tránsito habitual.
Al cierre de la caminata se reportaban en las redes fotos y videos de actos violentos y detenciones, hechos que también están siendo denunciados por las redes sociales y que han causado disgusto, reacciones de desaprobación y nuevas tensiones.
“¿Estas son las fotos que la Revolución Cubana desea que recorran las redes sociales? ¿De veras?”, preguntó desde su muro en Facebook el actor cubano Luis Alberto García.
“Lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros, queers, intersex, y asexuados (y todas las otras denominaciones habidas y por descubrir) son hijos y devotos de Martí. Ellas, ellos (da igual) son también patriotas. Seres humanos. Cubanos bien nacidos, como todos los demás cubanos”, agregó antes de hacer un pedido público al presidente cubano: “Pare este desastre, por favor”.
Un sentimiento de pesar se mezcla ahora en los mensajes y reacciones de las redes.
“Hoy se han mostrado imágenes que no son de la Cuba que queremos y ambos bandos tenemos culpa en ello”, posteó en referencia a esos hechos Yoelkis Torres, trabajador de la Cultura en Matanzas, a poco más de 100 kilómetros de la capital cubana.
Torres se pronunció por el diálogo. “Luz, paz y amor diría alguien que conozco. Yo pediría coherencia, sentido, conversación, y me faltan más”, escribió en su muro de Facebook.
“Solo espero que tod@s estén bien”, agregó, “y que la violencia no sea el camino, porque así no vamos a llegar a ningún lado; es regresar atrás en el tiempo”.
Fuente: SEMlac